Mientras el Gobierno nacional analiza el modo en que se retomará la actividad tras el aislamiento social y obligatorio, las provincias mantienen las gestiones para que las actividades centrales de sus economías se reactiven, al tiempo que los gobernadores refuerzan los créditos productivos a tasas subsidiadas. La cuestión fue uno de los ejes de la videoconferencia que mantuvo ayer a la tarde el presidente Alberto Fernández con los mandatarios.

El gobierno de San Juan del peronista Sergio Uñac, las cámaras del sector y los sindicatos acordaron la metodología para que los dos principales emprendimientos mineros de la provincia vuelvan a ponerse en marcha desde esta semana, tras haber sido declarada la minería una actividad esencial. De este modo, el 25% de los trabajadores mineros empezaron ayer a subir a las minas de oro Veladero y Gualcamayo, ubicadas en los departamentos fronterizos de Iglesia y Jáchal, por periodos rotativos de 14 días.

“Hemos establecido la vuelta a las labores en cada uno de los emprendimientos de manera gradual, y comenzamos a trazar los primeros pasos a seguir para la reactivación”, dijo el ministro de Minería de San Juan, Carlos Astudillo.

En tanto, alrededor de 55.000 kilos de tabaco fueron comercializados hoy durante el primer día de acopio de la campaña 2019/2020 en Misiones. Con turnos y controles, 25 productores pudieron realizar la entrega de tabaco tipo Burley en la planta de la Cooperativa Agroindustrial de Misiones (ex CTM). El acopio se extenderá hasta el próximo miércoles en la planta de la cooperativa. En la provincia gobernada por Oscar Herrera Ahuad las madereras también empezaron a retomar su actividad con el objetivo de terminar de secar madera que se encuentra en secaderos y procesar rollos que están en planchada. La situación también se extiende a Corrientes y Entre Ríos, zona donde también el plan emergencia para la continuidad de la producción alcanzó al citrus.

Las provincias encararon un plan de emergencia focalizado en la continuidad de las cosechas, que además de favorecer el circuito productivo sostienen la mano de obra de trabajadores golondrina. En Cuyo, por caso, la excepción en las cosechas alcanza principalmente a la vid, pero también a los olivos, los membrillos y demás hortalizas. Mientras que en la Mesopotamia el sector yerbatero inicia en abril la zafra gruesa, que se extiende hasta septiembre.

Pero también hay sectores industriales que las provincias buscan reactivar, como por ejemplo el sector de la electrónica en Tierra del Fuego. Ayer el gobierno de Gustavo Melella impulsó el diálogo entre la cámara AFARTE que agrupa a las empresas y el gremio de la UOM, luego de que las firmas pagaran un 70% de los salarios, en una actividad que antes del aislamiento tenía un 57% de la capacidad ociosa. La intención de la administración fueguina es que alcancen un acuerdo para reiniciar la fabricación de productos electrónicos. La menor recaudación llevó a que Melella ayer anunciara que suspenderá por 60 días el aumento de los salarios a empleados estatales, que estaba pautado para este mes.

El ministro de Indistria de Córdoba, Eduardo Accastello, se mostró optimista ras conocerse la semana pasada la ampliación del listado de actividades y servicios declarados esenciales en la emergencia. El funcionario de Juan Schiaretti consideró que “un 60% o 65%” de la actividad de la provincia quedaba reestablecida. También el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, ultimaba dedalles para el regreso de la producción agropecuaria, la forestal y las curtiembres, en línea con las gestiones de otros gobernadores.

En cuanto a los palaitivos a los sectores en crisis, ayer el Gobierno de La Pampa y el banco público de la provincia lanzaron créditos para empresas con tasa de interés 0%, con tres meses de gracia y un plazo de doce meses para pagar. Una medida similar ya había tomado antes el mandatario de La Rioja, Ricardo Quintela, al ser la primera provincia en ofrecer tasa cero.

El gobernador pampeano Sergio Ziliotto junto al presidente del Banco de La Pampa, Alexis Iviglia, señalaron que la cartera para los préstamos alcanza los $1.000 millones y el objetivo es que las empresas del comercio, la industria y los servicios garanticen la sustentabilidad de sus negocios y que los trabajadores cobren sus salarios.