Su uso a nivel global se ha multiplicado por seis durante el siglo pasado y, de mantenerse esa tendencia, se enfrentará un déficit mundial de agua del 40 % para 2040.(Unesco)

En 20 años, la demanda global de agua potable será mayor al suministro. Su utilización se ha multiplicado por 6 y según un trabajo de la UNESCO, el mundo se enfrentará a un déficit global de agua del 40% para el 2040.  (Fuente)

Las ciudades no solo son grandes consumidoras de agua, sino que también ejercen la mayor presión sobre los sistemas e infraestructura. Utilizarla de manera eficiente y económica nunca ha sido más importante que en la actualidad y, sin embargo, seguimos tratando el agua como un bien inagotable.  La pérdida del 50 % de agua a través de fugas en redes de distribución obsoletas no es infrecuente en las zonas urbanas. Agua que, si se ahorra, podría abastecer hasta 20 millones de habitantes de zonas urbanas (Fuente). Para ello, es importante adaptar nuestras ciudades para hacer frente a la escasez hídrica de forma eficaz lo cual es posible, pero requiere una mentalidad radicalmente diferente.

En Argentina la pérdida de agua por fuga equivale al 40%. En los EE. UU., un promedio del 13% del agua doméstica se pierde a través de inodoros, canillas y electrodomésticos con fugas. Puede que esto no parezca mucho, pero todas esas gotas ascienden a casi 25 mil litros por año por hogar (Fuente). Los daños causados por fugas cuestan a los propietarios de viviendas en el Reino Unido un promedio de £ 13,6 mil millones cada año. En otras palabras, reparar las fugas no solo es bueno para el medio ambiente, sino también para el bolsillo.

El aumento de la población urbana va de la mano de un incremento de la demanda de agua para la fabricación, la generación de energía térmica y el uso doméstico. Sin embargo, nuestra infraestructura de agua actual no es capaz de distribuir de manera segura y eficiente esta cantidad de agua a través de nuestras ciudades. Los sistemas de suministro y plomería obsoletos continúan mostrando signos del paso del tiempo y deterioro, y gran parte de nuestra valiosa agua potable está muy contaminada o ni siquiera llega a nuestras canillas. (Fuente)

«En las áreas urbanas, el agua está disponible de la canilla, lo que crea la ilusión de que el agua limpia y el agua potable no son recursos. Existe una necesidad evidente de un cambio de paradigma en la forma en que pensamos y manejamos el agua limpia. Las ciudades ya no pueden tratar el agua como una mercancía», explicó Víctor Guajardo, Gerente General de Amanco Wavin Argentina.

«Los problemas del agua se abordan generalmente como un tema global cuando, en realidad, estos desafíos deben resolverse a nivel local. Todos somos parte de este cambio, desde ciudadanos individuales, iniciativas locales, empresas, gobiernos, hasta instituciones del conocimiento», agregó Guajardo.

«En Amanco Wavin estamos redefiniendo la industria de las tuberías con soluciones innovadoras a largo plazo y que requieren un menor tiempo de instalación. Disponemos además, de los mejores expertos para ayudar a las ciudades a planificar sus sistemas de abastecimiento de agua potable y saneamiento para prepararse para el futuro», finalizó.

 

Acerca de Amanco Wavin

Amanco Wavin (www.amancowavin.com.ar) es una de las marcas comerciales de Wavin, la primera empresa del mundo en crear tubos de presión de PVC en 1955 en Zwolle, Países Bajos. Hoy, Wavin está presente en más de 40 países y es líder en la fabricación y en el suministro de tubos plásticos. Con más de 12000 empleados en más de 40 países, Wavin forma parte de Orbia, una comunidad de empresas unidas por un objetivo común: impulsar la vida alrededor del mundo. Listada en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Orbia terminó el año 2020 con un ingreso anual consolidado de US$ 6,4 mil millones de dólares. Para obtener más información, visite orbia.com.

Amanco Wavin tiene el propósito de cooperar con el bienestar de las personas y con el desarrollo saludable y sostenible de la sociedad, al fabricar productos innovadores y con un alto estándar de calidad. La marca desarrolla productos para los mercados de edificación, infraestructura, agrícola e industria y minería.